La Primera Guerra Mundial es un tema que siempre me ha fascinado. Supuso una ruptura total con el pasado que hasta ese momento los habitantes de Europa, y de gran parte del mundo, conocían. Una Europa imperial y unitaria daría paso, tras cuatro años sangrientos, a una Europa fragmentada y convulsa. Pero la Primera Guerra Mundial también sería el trampolín definitivo para la mujer trabajadora que pudo demostrar su valía y propiciaría una de las grandes juergas demenciales entre la juventud del momento: los locos años 20.
Los que vivieron y sufrieron en directo esa terrible guerra la recordarán toda la vida, y no sólo ellos, también sus padres, amigos, novias o hermanos pequeños. Todos padecieron el impacto de una epopeya guerrera salvaje y despiadada que nadie, absolutamente nadie, se esperaba.
BBC nos llega una mini serie estrenada el año pasado con motivo del centenario del inicio de la Primera Guerra Mundial, que nos acerca ni que sea un poco a lo que debieron sentir aquellos jóvenes soldados ilusionados por el delirio patriótico reinante que dieron de bruces con una realidad espantosa y en muchos casos insoportable.
Our World War sólo consta de tres episodios, tres episodios maravillosos en los que se retratan de una manera fascinante tres momentos de la Gran Guerra que nos sirven para entender la magnitud de tragedia. Las tres historias están basadas en relatos auténticos de personajes que vivieron la guerra en los diferentes frentes ingleses. Sacados de sus vivencias literarias y de entrevistas de radio, podemos escuchar al final de cada capítulo a sus protagonistas reales, nos cuentan fidedignamente tres historias personales que bien pueden definir algunos de los momentos más importantes de la guerra.
La serie es basada en testimonios de los soldados que sirvieron en la Primera Guerra Mundial.
Es la historia detrás de cada uno de ellos nos acercan de una manera muy real que nos hacen pensar que sentiríamos si estuviéramos viviendo lo mismo que los soldados. Sus ganas de ganar, el miedo que le tenían al enemigo, la incomprensión de la guerra, las dudas, el temor al regresar y que nada fuera igual. Son tantos los sentimientos que pasaron en batalla que esta serie te los hace sentir.
Joe Barton, el escritor de la serie, basó este drama en relatos de primera mano de lo que sucedió durante la Primera Guerra Mundial.
La serie hace uso de técnicas de película modernos como cámaras fijas, montados en la carrocería y animaciones de escenas de batalla de arriba, efectos especiales, junto a una banda de sonido moderno con artistas como PJ Harvery, para atraer a un nuevo público. Todo esto logra que se vea todo muy realista.
Algunas partes de los episodios fueron grabadas en el histórico astillero de Chatham, Kent que se extendía como la sede británica de Mons.
Al ver la serie te imaginas como si en realidad hubiese sido grabada en 1914. Como si alguien del pasado hubiera grabado en documental las vivencias de los soldados.
El primer episodio es llamado “El primer día” que trata sobre que después de dos semanas de que se declaró la guerra, el 4º batallón de la Fusileros Reales establecieron defensas alrededor de la ciudad belga de Mons. Esperan marchar más allá de los puentes de la ciudad a la mañana siguiente. Poco saben, sin embargo, el ejército alemán ya ha llegado al otro lado del canal.
El segundo episodio llamado “Pals” es sobre un grupo de trabajadores de la oficina de Levenshulme, buscan unirse a un local de batallón de Pals, el 18 Batallón, Manchester Regimiento. Pronto se encuentran frente a los alemanes en el Somme. Meses después, Paddy Kennedy le suplica al capellán del batallón que lo deje fuera del pelotón de fusilamiento que lo verá matando a uno de los amigos que hizo en su viaje.
El tercer episodio llamado “Maquina de guerra” es cuatro años después de la guerra, los británicos desplegarían tanques a lo largo de la frontera alemana, para romper el estancamiento. Un joven Chas Rowland se une a la tripulación de uno de estos tanques, el niveleur, que se prepara para la batalla de Amiens. Pero los próximos días cobrarán su peaje en la tripulación, y Chas debe valeroso humos, un motor temperamental, y las condiciones de estrecho para entregar un mensaje a casa.
Es una gran serie ya que conoces mas sobre la Primera Guerra Mundial y experimentas a lejos de lo real lo que vivieron los soldados.
